La Taberna de la Elisa

Solo hay que echarle un vistazo rápido a la carta de La Taberna de Elisa para saber que es todo una declaración de principios: boquerones en vinagre, gambas rojas al ajillo, patitas de calamar fritas con ajo y limón, patatas bravas, oreja de cerdo crujiente con mojo y salsas, croquetas cremosas de jamón, callos, caracoles en salsa con jamón, chorizo y hierbas del monte o morro rebozado con salsa vizcaína…. Platos  muy nuestros, que el grupo Triciclo pone en valor en este espacio emblemático del Madrid más auténtico que abrió sus puertas en 1907 y que ahora con el importante empuje de Triciclo vuelve a cobrar protagonismo en el barrio de Las Letras. Sin duda el local acompaña: amplia barra de madera, mesitas con cubierta de mármol, azulejos e incluso se ha respetado la colección de cervezas que lucen las paredes o algún que otro cartel con avisos de otros tiempos en un local dividido en dos plantas–para los que busquen tranquilidad les recomendamos el comedor de la planta baja-. Se nota la mano de Triciclo y su filosofía que da importancia a los guisos y a las cocciones lentas y las actualiza para que las podamos comer de manera informal y en raciones o medias raciones. Pocos podían dudar, pero, efectivamente, Triciclo ha vuelto a acertar con su sensibilidad, instinto y profesionalidad.